A fines del siglo XVIII Libertad y Revolución llegan a ser sinónimos; así como hoy una minoría enloquecida cree que las aspiraciones de justicia social no podrán realizarse sino a través de una transformación radical y punitiva de toda la sociedad.
Fue en aquellos momentos, y es en los
actuales, el triunfo del jacobinismo: jacobinismo en los hechos, sanguinario y
repugnante, o sólo en las ideas y en la prédica, igualmente penetrado de una
terrible credulidad....